Tenemos tantas cosas por explotar de los escenarios urbanos,
recuerdo que antes odiaba esto, aún así,
me siguen gustando los pueblos, los bosques y todo lo que no se por aquí.
Vivir en una urbe tercermundista (y esto no tiene nada que ver, sólo que somos una ciudad grande pero no una gran ciudad),
donde el individualismo y el egoísmo hacía el prójimo es la actitud predominante, donde todos esperan siempre algo a cambio,
donde la gente vota por quien en realidad no los beneficiaria, pensando en que las propuestas para mantener la riqueza van dirigidas hacia ellos (lo cual no es así), pero el hecho de negar su pobreza los hace ser de cierto modo más felices, y al decir "yo vote por el imbecil ese de la sonrisa de idiota y palabras incoherentes" los hace sentir más cultos,
vivir en una urbe donde el sentido común escasea,
nadie sabe que es lo que en realidad pasa en su país,
nos llamamos el país de "no pasa nada" no porque no pase, sino porque la gente no lee, ni siquiera los periódicos que sí dan la noticia, no pasa nada, porque si lo ignoro es como sino sucediera, no pasa nada, porque estoy demasiado preocupado pensando en mi, no pasa nada, porque en las noticias de la tele no pasan nada, y ya, pero que pasa en la urbe, no nos vayamos tan lejos, como Oaxaca por ejemplo.
Aquí, ¿que pasa?, con el transporte, impuestos, remplacamientos, estupideces del Cardenal que no debería estar metido en la política, que pasa con los trabajos, las injusticias, la ecología; pues no pasa nada, a nadie le importa, y nunca faltara el comentario de aquel que quiera discutir o dar la contra. Es parte de lo politizado que esta todo, y lo diverso, ideas, idealismo, ignorancia. Yo no tengo la razón, ni la verdad total, nadie la tiene, todo es subjetivo, aquí no hay malos ni buenos y ya, simplemente hay personas que no tienen ni idea, de nada, y que ni siquiera se dedican a alguna actividad productiva, pero
Se vale ser egoísta de vez en cuando y hacer cada quien sus proyectos, quizá no hablar de política en un lugar fuera de contexto, pero debemos tener conciencia y empezar por uno mismo. Hay que ser constructivitas, pues ya ahí cada quien su opinión, en fin, que más da.